Marcos y Eduardo González, sabor agridulce en el Rally Cataluña

En su debut mundialista, los canarios no han podido culminar con suerte su participación en el Rally RACC Cataluña. Un golpe con una valla en la súper especial urbana de la primera jornada en el centro de Barcelona, un posterior pinchazo cuando se reenganchaban a la carrera y por último la rotura de motor, frustraron las ilusiones de los canarios para ocupar una de las plazas de privilegio dentro de la Beca Roberto Méndez Competición (RMC).

Informa. Juan González.

“Ha sido un año en el que hemos aprendido mucho. Estoy convencido de que participar en la Beca Roberto Méndez ha sido una decisión acertada por haber combinado asfalto, tierra, montaña y un rally como el de Cataluña. Hemos obtenido buenos resultados, luchando por el título hasta la última prueba y aunque se nos ha escapado la victoria, hemos acumulado mucha experiencia. No puedo olvidar que es mi segunda temporada compitiendo”, apunta el piloto lanzaroteño.

Marcos y Eduardo acudían a la última cita de la Beca con opciones de luchar por la victoria, pero rápidamente se frustraron sus ilusiones al impactar con una valla y dañar su Ford Fiesta R2, lo que les obligaba al abandono en su estreno en el Rally de Cataluña. Una vez reenganchados a la prueba, los cronos fueron mejorando a medida que avanzaba la competición, pero nuevamente la adversidad se cebaba con los canarios al pinchar un neumático.

Situados en la cuarta posición de trofeo, el motor cedió definitivamente y les llevó a la irremediable retirada. “Debíamos vigilar a Alberto Otero para no perder la posición, así que salimos con la cabeza muy metida en la carrera desde el primer momento. Íbamos muy bien, sacando distancias, pero entonces, al llegar al control previo a la asistencia, el motor dijo basta.”