Lo que tenía que ser una jornada festiva y eminente deportiva con motivo de la sexta edición de la Subida a Valle Tabares-Jiménez se convirtió en una tragedia tras el grave accidente de un espectador, Alejandro Solana, por la salida de carretera de un piloto en el transcurso de la primera manga oficial. Aunque el dispositivo de seguridad previsto por la organización realizó su trabajo con gran diligencia, horas más tarde se confirmó que el joven se encuentra grave, en estado de coma inducido pero estable y respirando por si mismo. Las próximas 48 horas serán muy importantes para su evolución. Su fallecimiento fue confirmado hoy lunes (27).
Redacción.
Todo transcurría bajo los cauces previstos hasta que una salida de carretera del Mitsubishi Evo VIII de Tomás Negrín en una de las curvas del trazado -conocida popularmente como la de los ‘cochinos’- se llevó por delante a un espectador. El impacto fue tremendo y el vehículo número 25 cayó por un terraplén. Una ambulancia con dos médicos atendió inmediatamente a la víctima, que fue trasladada a un centro hospitalario. Debido al accidente, la organización decidió suspender la manga en la cual se produjo el suceso, pero una vez actuaron los servicios de emergencia, se reanudó la competición. La gravedad de las heridas hizo temer lo peor desde el primer momento.
Los triunfos de Jonathan Morales en barquetas y Víctor Delgado en turismos quedaron en un segundo plano ante la magnitud de los sucesos acaecidos en la carretera de Los Campitos (TF-111). Fue una jornada aciaga para el automovilismo tinerfeño y canaria, ya que horas antes se había conocido el fallecimiento del piloto Moisés Rodríguez ‘El Maca’.
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