El copiloto Miguel Ángel González hospitalizado

Indignación es la palabra utilizada para describir los malos momentos sufridos por el copiloto grancanario Miguel Ángel González, tras su grave accidente ocurrido en el tramo cronometrado de Artenara, al volar unos 40 metros de caída. González acompañaba a Tino Guerra en un Peugeot 208 VTi, montura con la que se salieron de la carretera el pasado viernes cuando disputaban el Rally Islas Canarias. Las asistencias médicas tardaron una hora en atenderle a pesar de las advertencias de la gravedad de las lesiones.

Informa. Juan González

El accidente sobrevino a un kilómetro del conocido salto de Artenara. “Una hora tardaron en llegar las asistencias médicas de la prueba para poder atenderme de los daños sufridos. Tino Guerra se dejó la garganta solicitando que se detuviera la competición para que me pudieran socorrer”, dijo el conocido copiloto desde el centro sanitario donde se encuentra para ser intervenido quirúrgicamente el próximo viernes.

Gracias a los conocimientos que posee Miguel Ángel sobre daños en la médula, la gravedad de la situación no ha ido a mayores. El copiloto actuó con frialdad ante un dolor intenso. “Que no me toquen, tengo que estar inmovilizado hasta ser atendido por un especialista”, comenta. Los daños físicos valorado tras su hospitalización afectan a una vértebra que está presionando la médula, fue detectado tras una resonancia magnética.

El desplazamiento al centro sanitario fue un calvario según manifiesta González, que con resignación se mantiene inmóvil y con la moral fuerte por los muchos apoyos que ha recibido de otros participantes y aficionados.