Redacción
El Rally estuvo organizado una edición más, como cabeza visible, por la familia Klein (mundialmente conocidos por su agencia de fotografía deportiva “McKlein”), que en esta ocasión reunió a casi 170 vehículos de todo tipo, desde coches de los años 60, 70, Gr.-A de los 90, primeros WRC de finales de los 90 y principios del 2000.
La emoción la ponían, los grupo B, con más de 50 inscritos. Tomaban la salida también, algún que otro vehículo de la mítica subida al Peaks Peak como el Peugeot 405 T16 y dos unidades de Audi y por último, los que se llevaron las miradas de todo el mundo, los que desprendían admiración, levantaban los aplausos y el murmullo de la gente y que te hacían desprender una sonrisa de emoción y complicidad a su paso con los colegas, los grupo S, prototipos que deberían haber jubilado a los grupo B, que tenían previsto entrar en competición en el año 1987, tras el cambio de normativa para ese año.
Pero que debido a la “peligrosidad” de los primeros –Grupos B-, y tras el fallecimiento de Henri Toivonen y Sergio Cresto en Mayo de 1986 en el Rally Tour de Corse (Italia), la FIA puso fin a esta etapa en los rallyes, y por consiguiente la de los Grupo S, y de los que la historia, por este motivo, ha hecho ser las verdaderas joyas de cada fábrica.
Audi RS 002 Grupo B, la atracción
Ford RS200 grupo S, Ford Escort RS1700T Evo, Toyota 222D, Opel Kadett 4×4, Skoda 130 LR Evo, y la verdadera joya de la corona, el Audi RS002, hacían las delicias del público. Éste último, con sólo 12 km en su marcador, volvía a rugir por las carreteras de los alrededores de Daun, una máquina que a buen seguro pasó sus 30 años de vida, en las instalaciones de Audi Sport, con el mimo que se merece, dado su perfecto estado de conservación. ¿Y quién era el afortunado piloto, os preguntaréis? El piloto por excelencia en la casa bávara de los aros, un mito viviente para los alemanes y para el resto del mundo, por su pilotaje, y por su afán por complacer a los aficionados, ya sea con fotos, posters, firmas, etc… el gran Walter Röhrl.
Otros míticos pilotos que se dieron cita en la prueba germana fueron Miki Biasion, Stig Blomqvist, Matthias Kahle, Yves Loubet, y no tan míticos pero si rápidos y espectaculares como Luca Betti, Georg Berlandi, Loris Candian, o los españoles que se desplazaron hasta tierras alemanas a disfrutar del evento, Fernando Garrido con su 205 T16 E1 o José Pujol con el Lancia 037… Un verdadero elenco de pilotos que hicieron las delicias de los aficionados los tres días, que duró, éste verdadero espectáculo, muy similar al Rally Trasmiera celebrado en Santander.
Se puede decir y por lo tanto agradecer: a la organización, que para ser el 30 aniversario de los grupo B, se ha lucido de lo lindo, que es fecha marcada ya, en rojo, en el calendario para años venideros, tanto por la cantidad como por la calidad, tanto de coches como de pilotos que hacían disfrutar a los allí presentes y a Audi Tradition, por poner en liza, los coches oficiales de la época, Audi Sport Quattro S1, Audi Sport Quattro S1 E2 y el ya mencionado Audi RS002 Grupo S.
Será en la próxima edición cuando los aficionados vuelvan a disfrutar de un evento retro de rallies….
Fotografía: | David Roldán |
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